Fútbol Internacional
Equipos chilenos en la Libertadores 2021: no alcanza ni para soñar
Por Luis Casanova R, periodista
Más allá de los buenos deseos que todo hincha promueve para cada uno de sus equipos, la realidad debe imponerse. Por lo mismo, la temporada 2021 que pronto comenzará solo tiene un gran objetivo: flotar y sobrevivir y ojalá dar alguna sorpresilla loca por ahí en medio del largo océano que hay que navegar.
De momento, en la Copa Libertadores, que es el torneo más importante de todos y el único que en realidad importa, solo apuntamos a clasificar a segunda ronda. No hablamos de ser protagonistas o ganarla. No. “Solo” llegar a segunda fase. Y es solo entre comillas, porque para poder lograr eso hay que pasar por encima de una ardua competencia continental que durante muchos años el fútbol chileno no ha sido capaz de dar.
Y acá la señal es clara: los cuadros nacionales clasificados para la Copa solo se están reforzando para las competencias locales, postergando lo internacional.
Por ejemplo, U. Católica, que se equivocó medio a medio con la traída de Ariel Holan, apostó por Gustavo Poyet como DT, que aunque dirigió en la Premier League tiene eso de defender primero y atacar después tan clásico de los uruguayos. En suma, si viene a ratonear, no sirve. Y si no hay refuerzos de peso, con mayor razón. Con la cantera no alcanza ni siquiera para soñar.
Lo mismo calza para U. La Calera, que también entra a fase de grupos junto a los cruzados y que no pudo retener a Juan Pablo Vojvoda, artífice de la gran campaña de los cementeros, y U. de Chile y Unión Española, que debutan en fase previa y que estrenan caras nuevas que dieron que hablar en el pandémico campeonato 2020-2021, pero que no aseguran un buen rendimiento para competir afuera.
Veremos si a Yonathan Andía no le pesa el cambio de camiseta viniendo de los cementeros, porque Marcelo Palacios brilló con la UC en la Libertadores, ¡pero de hace diez años!
Y con los hispanos ocurre lo mismo, dado que si uno mira los jugadores que trajo para el estratega Jorge Pellicer (Chumacero, Rubio, Magnasco, Jorquera, Abrigo, Farfán, Lemmo, Villagra y Miguel Pinto), solo los que dieron que hablar en la Sudamericana con la camiseta de Coquimbo debieran dar el tono fuera de casa. Los demás son una incógnita.
Colo-Colo, que llegó a cuartos de final en 2018, invirtió mucha plata para dar la pelea ante los gigantes, porque con las ganas no basta. Mejor ni mirar las planillas de los últimos campeones, Palmeiras, Flamengo, River Plate y Gremio, y los jugadores que contratan año a año, cuyos contratos oscilan entre los 8, 10 y 12 millones de dólares o incluso más.
Raya para la suma: para hacer goles y levantar copas hay que invertir, pero invertir bien. De lo contrario, seguiremos condenados a vestirnos con ropa de casa para pasar frío fuera de nuestras fronteras.